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Nuestra compañera María Isabel López Fernández, psicóloga y miembro del Grupo de Trabajo del Educación Terapéutica, falleció en Madrid el pasado 13 de agosto. Sus compañeros del grupo le dedican estas bonitas palabras:

Querida Marisa,

Cuesta encontrar las palabras para despedir a alguien tan especial como tú. Aunque ya no estás entre nosotros, te has quedado para siempre en nuestros corazones. A todos los que tuvimos el privilegio de conocerte y trabajar contigo, nos dejaste una gran huella. Tu paso por la vida fue mucho más que el de una profesional dedicada; fue el de una amiga, una compañera y una mujer excepcional, llena de ganas de vivir.

Tu nombre, María Isabel López Fernández, estará siempre ligado a la dedicación y el amor por tu trabajo como psicóloga, especialmente en el ámbito de la diabetes. Fuiste un miembro muy querido dentro del Grupo de Trabajo de Educación Terapéutica y colaboraste con muchas asociaciones de personas con diabetes como ADIVAL, FUCAMDI , ADIJE , donde tu aportación fue siempre desinteresada y enriquecedora. Tus charlas, consejos y apoyo en los campamentos educativos ayudaron a muchos jóvenes, orientándolos no solo en el manejo de su enfermedad, sino también en cómo cuidar su bienestar emocional. En cada palabra, en cada gesto, se notaba tu compromiso, tu entrega y, sobre todo, tu generosidad.

Conocerte fue un regalo. Desde el primer momento llamó la atención tu capacidad de dar sin esperar nada a cambio, tu fuerza y tu tenacidad. A lo largo de todos estos años, nos ofreciste lo mejor de ti: tu conocimiento y, aún más importante, tu calidez humana. Fuiste una de esas personas que no se olvidan, que siempre dejan algo positivo allá donde van.

Aunque tu muerte no nos permitió verte terminar tu segunda tesis doctoral, tu legado y ejemplo nos acompañarán siempre. Fuiste una luchadora incansable, llena de vida y proyectos.
Marisa, te extrañaremos mucho. Tu vacío será difícil de llenar, pero nos reconforta saber que siempre serás parte de nosotros, de esta gran familia que formamos a lo largo de todos estos años. Gracias por todo lo que nos diste, por cada palabra, cada sonrisa y cada enseñanza, por tu compañía. Nos quedamos con tu ejemplo y tu pasión por la vida…

Hasta siempre, compañera y amiga.

Tus compañeros del GT de Educación Terapéutica de la SED